España acaba de inaugurar la tercera edición del programa ‘Climate Ambition Accelerator‘ del Pacto Mundial de la ONU, que cuenta con la participación de 75 empresas españolas, sumándose así al total de 2.500 participantes en todas sus ediciones a nivel mundial.
En un contexto donde la lucha contra el cambio climático se intensifica, las corporaciones avanzan hacia modelos de negocio respetuosos con el medio ambiente
A pesar de que los contaminantes atmosféricos han mejorado en los últimos 20 años en España, el informe publicado por el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico muestra que el país sigue superando el límite recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el ozono.
La Unión Europea y Noruega han firmado una alianza verde para reforzar sus compromisos en política climática, que incluye la realización de acciones conjuntas, la protección del medio ambiente, la cooperación en energía limpia y la transición industrial.
En España, las emisiones de CO2 sujetas al mercado de derechos aumentaron en un 9,07% en 2022, debido al aumento de la actividad en los sectores de combustión, refinería y aviación, según un análisis de Global Factor, que informó que el año pasado se emitieron 103,28 millones de toneladas de CO2.
El objetivo central fijado por la UE para las décadas venideras es la lucha contra el cambio climático. Con el fin de abordar este desafío, los países integrantes han activado una estrategia denominada Pacto Verde Europeo.
Conoce la «Task Force for Climate-related Financial Disclosures» o TCFD (Grupo Trabajo Divulgaciones Financieras relacionadas con el clima). En este artículo, exploraremos qué es el TCFD, su importancia, los principios que lo rigen y cómo está influyendo en la manera en que las organizaciones reportan su exposición al cambio climático.
La acumulación excesiva de gases de efecto invernadero en la atmósfera está desencadenando graves consecuencias del cambio climático: sequías más frecuentes, temperaturas extremas, inundaciones destructivas, y la acidificación de los océanos.
En un mundo cada vez más consciente de la importancia de la sostenibilidad, la huella ambiental se ha convertido en un indicador clave para entender el impacto que tienen las actividades humanas sobre el planeta.