La Unión Europea aprueba formalmente un acuerdo que establece nuevas reglas para reducir las emisiones de CO2 de los vehículos pesados nuevos. Este acuerdo, alcanzado en enero, tiene como objetivo reducir las emisiones de camiones y autobuses en un 90% para 2040, marcando la adopción final de las nuevas regulaciones.
La reforma respalda la propuesta de la Comisión Europea de objetivos escalonados, con una reducción del 45% de 2030 a 2034, del 65% de 2035 a 2039, y finalmente del 90% en 2040, comparado con los niveles de 2019. Estas metas se aplicarán a camiones pesados de más de 7,5 toneladas y autocares, sector que contribuye con más del 25% de las emisiones de gases de efecto invernadero del transporte por carretera en la UE.
Se harán excepciones a estas metas para los fabricantes pequeños y los vehículos utilizados en la minería, silvicultura, agricultura, fuerzas armadas, servicios de bomberos y protección civil, orden público y atención médica.
El reglamento ampliado también abarcará vehículos profesionales como camiones de basura y hormigoneras a partir de 2035, y se considerará la inclusión de camiones más pequeños, de menos de 5 toneladas.
Además, se establece un objetivo de cero emisiones para los autobuses urbanos, con una meta intermedia del 90% para 2030. Los autobuses interurbanos estarán exentos de este objetivo y se incluirán en las metas generales para autocares.
La Comisión Europea revisará la eficacia y el impacto de este reglamento en 2027, incluyendo una evaluación del papel de un factor de corrección de carbono en la transición hacia una movilidad sin emisiones en el sector de los vehículos pesados.
Una vez firmado el reglamento por las instituciones, será publicado en el Diario Oficial de la UE y entrará en vigor 20 días después de dicha publicación.