La CE presenta por primera vez una serie de medidas para prevenir la contaminación por microplásticos causada por la liberación no intencional de pequeñas partículas de plástico, conocidas como “granza“.
En la actualidad, anualmente se liberan al medio ambiente entre 52 y 184 toneladas de gránulos de plástico debido a una mala gestión en toda la cadena de suministro. El objetivo de la propuesta es asegurar que todos los operadores de la UE que manejan gránulos adopten las medidas preventivas necesarias. Se espera que esto reduzca la liberación de gránulos en un 74%, promoviendo ecosistemas más limpios, evitando la contaminación de ríos y océanos con plástico y disminuyendo los posibles riesgos para la salud humana. Además, las medidas adoptadas a nivel de la UE también fomentarán una competencia igualitaria entre los operadores.
La emisión no deseada de microplásticos a causa de los gránulos de plástico es una de las principales causas de contaminación. Para hacer frente a esta problemática, la Comisión sugiere que los responsables actúen en base a las siguientes prioridades: en primer lugar, tomar medidas preventivas para evitar la liberación de gránulos; en segundo lugar, contener los gránulos derramados para asegurar que no afecten al medio ambiente; y por último, en caso de vertido o derrame, proceder a la limpieza correspondiente.
La propuesta incluye los siguientes aspectos:
– Mejores prácticas de manipulación para los operadores: Dependiendo del tamaño de la instalación o la actividad de transporte, los operadores deberán seguir ciertas prácticas específicas de manipulación. Estas medidas ya han sido implementadas por algunos pioneros.
– Certificación obligatoria y autodeclaraciones: Para facilitar la verificación del cumplimiento por parte de las autoridades nacionales competentes, los operadores más grandes deben obtener un certificado emitido por un tercero independiente, mientras que las empresas más pequeñas deben hacer una autodeclaración de conformidad.
– Metodología armonizada para estimar pérdidas: Los organismos de normalización desarrollarán una metodología armonizada para ayudar a los operadores a controlar sus pérdidas y abordar las brechas de datos existentes. Esto también debería aumentar la responsabilidad al crear conciencia sobre los impactos de diferentes prácticas en el medio ambiente y la salud humana.
– Requisitos menos estrictos para las PYME: Dado que una gran parte de la cadena de suministro de gránulos está compuesta por PYMEs, se aplicarán requisitos menos estrictos, especialmente para microoperadores y pequeños operadores.
El Parlamento Europeo y el Consejo discutirán la propuesta de la Comisión de un Reglamento que busca prevenir la pérdida de gránulos de plástico. Todos los operadores económicos, tanto dentro como fuera de la UE, deberán cumplir con los requisitos establecidos en el Reglamento en un plazo de 18 meses desde su entrada en vigor.
La Comisión continuará trabajando en la reducción de la contaminación por microplásticos, en el marco de la implementación de la legislación actual y futura sobre productos y residuos, y liderando los esfuerzos internacionales para acabar con la contaminación por plásticos.