Durante los primeros nueve meses de 2023, 45,8 millones de personas en España (equivalente al 96% de la población) han respirado aire contaminado por ozono en el 99% del territorio, como revela el informe anual de Ecologistas en Acción titulado ‘La contaminación por ozono en el Estado español durante 2023’. Este estudio utiliza los estándares de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que son más rigurosos que los establecidos por la legislación española y europea.
Un estudio ha analizado los datos recopilados de casi 500 estaciones de medición gestionadas por las comunidades autónomas (CC.AA) para evaluar la contaminación por ozono. A continuación, se han comparado estos datos con las recomendaciones de la OMS del año 2021. Como resultado, se concluye que 45,8 millones de españoles han estado expuestos a aire con altos niveles de ozono, un contaminante que ha aumentado significativamente en comparación con los años de la pandemia (2020 y 2021). Sin embargo, las concentraciones de ozono han disminuido en un 18% en comparación con los niveles anteriores al Covid-19.
Según el informe, las regiones más afectadas en 2023 han sido Andalucía, Castilla-La Mancha, Extremadura, Madrid y Murcia. Además, los niveles de ozono han aumentado en Asturias y el norte de Galicia, aunque han disminuido en el litoral Mediterráneo, el Valle del Ebro, el noroeste peninsular y Canarias.
El estudio también revela que, aunque las principales fuentes de contaminación por ozono son el transporte y la industria, el cambio climático, que provoca un verano más largo y una mayor radiación solar, junto con la falta de lluvias, ha agravado la situación en España.
El coordinador del informe, Miguel Ángel Ceballos, destaca que los niveles más altos de ozono en el aire se han registrado en primavera y verano de 2023 debido a las olas de calor. Además, menciona que el actual periodo de calor ha provocado un episodio muy alto de ozono en una estación de Puertollano (Ciudad Real) el 3 de octubre.
El informe señala que, si se toman como referencia los límites establecidos en la legislación española (que, según Ceballos, está obsoleta), el 5% de la población (2,2 millones de personas) ha respirado aire con niveles de ozono superiores a lo permitido entre 2021 y 2023 en zonas del interior de Cataluña y la Comunidad de Madrid. Sin embargo, si se toman en cuenta los límites propuestos en la futura normativa de la UE, ese porcentaje se eleva al 17% de la población (8,2 millones de personas) en España, concentrándose principalmente en Madrid, Cataluña, Castilla-La Mancha, Extremadura, Murcia y Baleares.
La contaminación por ozono causa alrededor de 2.500 muertes al año en España, según la Agencia Europea del Medio Ambiente. Sin embargo, durante el verano de 2023, según estimaciones del Instituto Carlos III, se produjeron 3.000 fallecimientos debido a las altas temperaturas y la respiración de ozono. Además, según datos del Banco Mundial, el coste sanitario y laboral de la contaminación por ozono en España ha sido de 5.000 millones de euros este año (equivalente al 0,33% del PIB español).
Este gasto no incluye los daños que el ozono provoca en la vegetación. Según Ceballos, dos tercios de la superficie cultivada en España se ve afectada por la reducción de la productividad debido al ozono.