La Asociación de Mercados Financieros (AMF) pide a las empresas que se anticipen a las obligaciones de información que les impondrá la directiva europea CSRD.
Como sabemos, la directiva europea de 14 de diciembre de 2022, conocida como “CSRD“, ha reforzado las obligaciones de transparencia de las empresas al exigirles la publicación de un informe de sostenibilidad destinado a sustituir a la actual declaración de resultados extrafinancieros.
Este informe tendrá que ser elaborado por un mayor número de empresas (en particular, todas las grandes empresas y todas las empresas que coticen en un mercado regulado, con exclusión de las microempresas) y tendrá que incluir una amplia gama de información medioambiental, social y de gobernanza. Las empresas que coticen en un mercado regulado se verán afectadas a partir del ejercicio 2024, y las demás lo harán progresivamente a partir del ejercicio 2025.
El Parlamento autorizó recientemente al Gobierno a transponer esta directiva antes del 9 de diciembre de 2023.
La información sobre sostenibilidad deberá presentarse de acuerdo con las denominadas normas “ESRS“, que se adoptarán mediante actos europeos delegados. El 31 de julio de 2023, la Comisión Europea presentó un acto por el que se establecen las normas aplicables a las empresas de todos los sectores de actividad (conocidas como “normas universales”), que incluyen dos normas transversales que establecen los principios fundamentales (ESRS 1) y la información general que debe facilitarse (ESRS 2) y diez normas temáticas que abarcan el medio ambiente, la información social y la gobernanza.
En dos comunicados de prensa publicados en su sitio web, la AMF señala que la aplicación de estas normas complejas en un plazo ajustado representa un reto importante para las empresas, que tienen todo el interés en iniciar o acelerar sus trabajos preparatorios sobre la base de la directiva y del proyecto de acto delegado relativo a las normas ESRS.
La AMF sugiere a las empresas que tomen las siguientes medidas:
La AMF también ha señalado varias prioridades para las empresas a la hora de aplicar la información sobre sostenibilidad:
La AMF reitera la necesidad de tener en cuenta la cadena de valor de la empresa (proveedores, clientes, etc.) en la memoria de sostenibilidad, lo que puede resultar complejo dado el gran número de partes interesadas. En opinión de la AMF, es importante anticiparse y establecer un diálogo con estas partes interesadas.
La AMF también insta a las empresas a velar por la coherencia entre los estados financieros y la información sobre sostenibilidad que deberá figurar en una sección específica del informe de gestión.
En opinión de la AMF, las empresas se beneficiarán de una reflexión previa suficiente sobre la forma más legible de organizar la información sobre sostenibilidad, teniendo en cuenta que el proyecto de acto delegado prevé normas de presentación (ESRS 1). En cualquier caso, será importante que las empresas sean transparentes sobre sus incertidumbres e hipótesis y sobre cualquier compensación que hagan.