La Comisión Europa da un paso significativo en la protección del medio ambiente al adoptar medidas que limitan el uso de microplásticos añadidos a propósito en los productos, en cumplimiento con la normativa de la UE sobre sustancias químicas (REACH).
Las nuevas regulaciones impedirán la liberación de alrededor de 500.000 toneladas de microplásticos al medio ambiente. Se prohibirá la venta de microplásticos y productos con microplásticos añadidos que se liberen durante su uso. En casos justificados, se darán excepciones y períodos de adaptación para los afectados.
La restricción incluye una amplia definición de microplásticos, que abarca todas las partículas de polímeros sintéticos insolubles y resistentes a la degradación de menos de 5 milímetros. El objetivo es reducir las emisiones de microplásticos intencionales en la mayor cantidad de productos posible.
Algunos ejemplos de productos comunes afectados son el relleno utilizado en superficies deportivas artificiales, cosméticos, detergentes, suavizantes, purpurina, productos agrícolas, juguetes, medicamentos y productos sanitarios.
Los productos industriales y aquellos que no liberan microplásticos durante su uso están exentos de la prohibición de venta, pero sus fabricantes deben proporcionar instrucciones para evitar la liberación de microplásticos durante su uso y eliminación.
Cuando la restricción entre en vigor, dentro de veinte días, se empezarán a aplicar las primeras medidas, como la prohibición de purpurina no adherente y microesferas. En algunos casos, la prohibición de venta se implementará posteriormente, después de un período más extenso, con el fin de permitir que las partes afectadas puedan desarrollar y aplicar alternativas.