El objetivo de este texto es que Europa produzca el 40% de sus necesidades anuales para el despliegue de tecnologías de emisiones netas cero de aquí a 2030, sobre la base de los Planes Nacionales de Energía y Clima (NECP). También pretende “captar el 15% del valor del mercado mundial de estas tecnologías”, según el comunicado de prensa del Parlamento.
Las tecnologías apoyadas incluyen todas “las tecnologías renovables, la nuclear, la descarbonización industrial, las redes, las tecnologías de almacenamiento de energía y la biotecnología”. El texto debería simplificar el proceso de concesión de permisos.
Sólo queda una etapa, la de la adopción formal por el Consejo, antes de que el texto pueda convertirse en ley.